Tiempo de Calidad

Con sólo escuchar estas palabras inmediatamente se puede pensar, ¿estoy compartiendo tiempo de calidad con mi familia o qué puedo hacer para lograrlo?

Para compartir tiempo de calidad sólo se requiere disposición y cariño, hacerlo con gusto y sin preocupaciones u ocupaciones que te distraigan de prestar atención completa a tus peques. Por ejemplo, pueden realizar actividades juntos como salir a practicar algún deporte, participar en juegos de forma activa, dejarlo crear, comer juntos, dibujar, platicar, conocer algún lugar, en fin, experiencias que los enriquezcan por igual y que puedan guardar en sus recuerdos familiares; tomar partido en la educación y formación de valores también es tiempo de calidad.

Hay que dirigirse hacia los niños siempre con respeto y platicar con ellos para saber cómo se sienten, qué tal su día de escuela, qué opina sobre cierto tema o situación, qué hubiera hecho él o ella, qué le agradó más, etc. Estas preguntas ayudarán a conocer más sobre sus sentimientos e ideas y se podrá descubrir que en ese pequeño momento en que se platicó se convirtió en tiempo de calidad con tu hijo o hija, porque de esta forma sabrá que te importa conocer qué piensa y cómo se siente, por lo tanto es esencial darle validez a sus ideas, opiniones y sentimientos.

No se necesita complacer cada capricho material de los pequeños para sentir que se cumple como padre, pues al final siempre habrá un juguete más nuevo y divertido que al que ya se le compró, pues los niños tendrán una idea errónea de lo que es tiempo de calidad y éste perderá su sentido y función.

Sin embargo, también habrá ocasiones en que será complicado que se comparta tiempo de calidad, por ello es importante hacerles saber que …

• “Pase lo que pase, siempre estaré para escucharte, y en caso de que una situación sea urgente o importante para ti, ten la confianza y seguridad de decirme que necesitas de mi atención”.

• “No importa lo enojados que estamos, siempre querré saber si algo bueno o malo te sucede”.

• “Pondré todo mi empeño por pasar un excelente tiempo contigo jugando o haciendo algo que disfrutemos”.

• “Como tu mamá (o papá) también necesito mi espacio y cuando lo requiera, te lo haré saber”.

Cuando los niños estan consientes de esta situación podrán comprender las cosas de mejor manera, pues entenderán que son queridos y aceptados a pesar de que en ocasiones no será posible compartir mayor tiempo o atención total. Es importante ser siempre afectusos al hablar con ellos, decirles la verdad de forma directa y sencilla considerando la edad que tiene tu hija o hijo.

El tiempo de calidad no es algo que se aprende, es un hábito que requiere práctica cada día y que se reinventa y se transforma, pues los niños no siempre serán pequeños. Llegará el momento de la adolescencia y el tiempo de calidad será aplicado diferente, pero es necesario e igual de importante en cualquier etapa del desarrollo. Pues ser padre y madre NUNCA termina.

Recuerda siempre aprovechar cualquier momento del día para convertirlo en tiempo de calidad, es ideal para la sana convivencia familiar.

 

TIPS PARA UN BUEN TIEMPO DE CALIDAD:

• Si tienes que hacer cosas procura involucrar a tus pequeños y comparte esos momentos.

• Organiza tu horario y esfuérzate para que compartir tiempo con tus hijos se convierta en algo prioritario.

• Mantén la comunicación con los pequeños a lo largo del día cuando no estes con ellos, por ejemplo con llamadas telefónicas, simplemente para preguntarles cómo están.

• Cuando estés con ellos dedicales tu atención e intererés en lo que hacen o dicen, por ejemplo en la hora de la comida o la cena eviten mirar la televisión y alienten una conversación sobre su día.

Es fundamental buscar espacios para compartir tiempo de calidad con cada miembro de la familia. Esto hará que se fortalezca el vínculo afectivo además de generar un ambiente seguro y felíz.

 

Pisc. Thalya Burgueño Aburto

Colaboración con Maciel Padilla